capitulo 3- Por que a veces los sueños se hacen realidad 3

Nuevo capitulo, espero que os guste, he tardado xq siempre escribo la historia en una libreta, y despues paso todo al ordenado, soy rara lo sé ( y no tengo solución...*]]

De verdad espero q os guste!*

Su casa era...¿como decirlo?...idéntica a la miá, bueno idéntica no, todo era tan...verde.

-No es difícil saber cuál es tu color favorito- murmure

-No es el verde- me susurro al oído.

Un escalofrió me recorrió la espalda.

-¿Miedo?- preguntó

Solté una pequeña risita, que sonó histérica y nerviosa.

-¿Vino?-me ofrecio

Enarque una ceja

-Un vaso de agua bastara- murmure girandome hacia el

-¿Tu mama no te deja beber?

-Ese no es el problema, es que no acostumbro a beber con desconocidos

-Pronto me conocerás, este es solo el principio- dijo de manera enigmática.

Fue a la cocina y regreso con una par de copas y una botella de vino en la mano.

-¿Y tus padres?- pregunte después de un momento acabando con el silencio que se había formado.

-De viaje de negocios- me contesto tendiéndome una copa de vino

El vino era dulce, no estaba nada mal, me bebí un trago.

-¿Quieres más? me ofreció a los pocos segundos

-¿No estarás intentando emborracharme para abusar de mi? ¿no?- le pregunte irónica

-No necesito emborracharte para abusar de ti- dijo con una sonrisa picara en la cara, mientras se acercaba a mi.

-Tu lo llevas claro- argumente un poco nerviosa por su proximidad

No contesto, sólo se siguió acercando a mi, sus labios estaban a escasos centimetros de los mios, sentía su aliento rozar mi cara.

-Bueno creo que ya es tarde, hasta mañana- dije con intención de irme, pero el me cogio de la muñeca y volvió a acercarme a él.

-Entonces te doy el beso de buenas noches- dijo. Poso sus manos sobre mi cara y cerro el espacio existente entre los dos con un beso dulce, apasionado, ¿prohibido?. No pude evitar devolverle el beso.

Nos separamos, y pude apreciar en sus ojos un brillo intenso.

-Bueno, hasta mañana-dije mientras salia disparada hacia mi casa, tenía las mejillas ardiendo. Cuando por fin llegué a casa me di cuenta de que no tenía las pastillas, y tampoco había averiguado como el sabia lo de mis sueños.

Me cambie y me lave los dientes, hice zapping durante unos 10minutos y me fui a (intentar) dormir.

…

-Selene tienes que correr, no mires atrás, tu corre lo más que puedas, cuando cuente tres sales detrás de mi y corres, y prometeme que no regresaras– me gritaba Gadiel. No respondí.

-¿Me escuchas?-repitió

Asentí levemente, mientras en mis ojos se abría un mar de lágrimas.

-¿Sabes que te quiero?¿verdad?-asentí de nuevo- Pues nunca lo olvides- añadió

Acerco su rostro al mío y me besó, pero fue un beso extraño, era como si nuestras almas se estuvieran fundiendo. Sentí como el también estaba llorando.

Nos separamos y nos quedamos mirando durante un largo tiempo. El empezó a buscar algo en sus bolsillos. Sacó un collar, formado por una media luna y una estrella adaptada a esta (pronto pondré una imagen)

-Esta echa de polvos de estrella-dijo mientras me colocaba- Y créeme no es nada fácil conseguir uno. Ahora contaré tres y saldrás corriendo. Vamos tu puedes.

-Uno, dos, y tres, corre.

Salí corriendo sin mirar atrás, de pronto escuché unos disparos y me gire. Error.

 

-Ringgggggggggggg!*- el despertador. Gemí

Me levante con desganes, me dirigí a ala habitación de mi madre, estaba vaciá...

Fuí a la ducha para darme un baño, el agua caliente me despejo. Salí y me puse una toalla en la cabeza, mientras me secaba el cuerpo. Fui a mi habitación y cogí unos tejanos, una camisa de colores y mis converse. Empecé a colocar los libros en el bolso. Fui a a a la cocina y me pusé un vaso de leche.

-Mierda- iba tarde. Me leve los dientes, me cruce el bolso y salí corriendo escaleras abajo, mientras llamaba a Ailén y Lía

-¿Selene?- contesto Ailén

-Sí- conteste

-Estamos en un atasco, adelantate- me respondio Ailén y antes de que pudiera decir nada más ya había colgado. Tenía todo el pelo en la cara, me puse una pinza y empece a a correr hacia la esquina para coger el autobús.

-¿El autobús ya ha pasado?-le pregunté a una señora que ya estaba allí.

-Sí, hace unos 5minutos, el próximo pasará dentro de 20minutos- me informo

-Mierda- mascullé

-¿Te llevo?- dijo una voz que ya se me empezaba a hacer conocida. Me giré, era Gadiel.

-No hace falta, dentro de poco vendrá el autobús.

-Sí,dentro de 20 minutos- me recrimino con una sonrisa de satisfacción.

Me acerqué a él, me tendió un casco y me subí a la moto. Le rodeé la cintura con mis brazos con el fin de no caerme. Sentía sus músculos a mi alrededor.

A los pocos minutos llegamos al instituto.

-Gracias le susurré al oído. Me bajé y le devolví el casco. Y me coloqué bien la pinza.

-Espera!*

-¿Que?- le pregunté mientras me giraba. Se acerco a mi, me quito la pinza y me revolvio un poco el cabello.

-Así te queda mejor-me aseguró.

No dije nada, simplemente me gire mientras me ruborizaba, escuche como soltaba una pequeña risita, vi que casi todos habían subido ya, así que me di prisa en soltar un gracias y subir corriendo las escaleras. Sentí sus pasos detrás de mi, me adelanto en pocos segundos entrando en clase. El profesor nos fulmino con la mirada, me dirigí hacia Dani, Stacy ignoro mi presencia, así que rápidamente me senté en mi sitio de siempre, al lado de Gadiel.